Edimburgo

Royal Mile

Royal Mile

Royal Mile

Esta calle es el eje de una visita a la ciudad y se extiende desde el castillo de Edimburgo hasta el Palacio de Holyroodhouse. Su nombre, evidentemente, proviene de la distancia que tiene, una milla escocesa (1,8km). A ambos lados de la calle se encuentran diversos comercios, callejones (closes) y patios aunque la Royal Mil ese divide en: el extremo del castillo, la parte más elevada, que cuenta con la explanada en la que se celebran distintas fiestas. La parte inmediata al castillo es Lawmarket, llena de tiendas de souvenirs y atracciones para turistas. En el tramo de High Street se encuentra la Catedral de St. Giles como punto de interés. El Canongate era una antigua aldea amurallada y que actualmente casi ni se percibe salvo por algunos baldosines metálicos en la pasada entrada a la ciudad. El final del recorrido es el Abbey Strand, que desemboca en la Plaza del Parlamento y el Palacio Holyroodhouse.

Castillo de Edimburgo

Castillo de Edimburgo

Castillo de Edimburgo

Esta fortaleza es uno de las imágenes mentales que tenemos antes de viajar a Edimburgo y se levanta sobre Castle Hill de forma majestuosa. Se accede a él a través de la Royal Mile y tiene varios rincones de interés en su interior, empezando por las vistas de la ciudad. Todos los días excepto los domingos, a la una en punto se dispara el cañón como tradición desde 1861.

Palacio Holyroodhouse

Palacio Holyroodhouse

Palacio Holyroodhouse

Hoy día sigue siendo la residencia oficial de la Reina de Inglaterra en Escocia y destaca por su decoración barroca interior acompañada por tapices, salones, obras pictóricas… En la torre del palacio se pueden visitar los apartamentos en los que vivió María Estuardo. También cuenta con una abadía contigua del mismo nombre, actualmente en ruinas pero de interés arquitectónico.

Mary King’s Close

Mary King’s Close

Mary King’s Close

Es uno de los iconos del Edimburgo más enigmático. Este callejón se abre paso en la ciudad antigua de la Royal Mile y después de estar cerrado durante años, abrió de nuevo sus puertas en 2003. El callejón es en realidad un acceso a la ciudad subterránea, donde la pobreza, la peste y la miseria reinaba en los siglos XVI y XVII. Gracias a la oscuridad y humedad del ambiente, sentiremos cómo vivían aquellas personas y conoceremos cada una de sus trágicas historias. En ningún caso, da miedo, pero puede ser delicado para los visitantes con claustrofobia.

Catedral de St Giles

Catedral de St Giles

Catedral de St Giles

Está en plena Royal Mile y es el edificio religioso más importante de Escocia, ya que en él John Knox estableció la iglesia presbiteriana. Es característica su torre en forma de corona y las cristaleras que iluminan su interior.

Corazón del MidLothian

Corazón del MidLothian

Corazón del MidLothian

Se encuentra cerca de la catedral. Está formado por piedras de granito en el suelo de la Royal Mile y señala el lugar donde antaño se encontraba la prisión de la ciudad. La tradición dicta que hay que escupir en él para tener suerte (ojo, en la ciudad está prohibido hacerlo) aunque realmente surgió como un gesto de protesta hacia el ayuntamiento o la cárcel.

Calton Hill

Si desde el Castillo se tienen unas vistas perfectas de la ciudad, desde Calton Hill se tienen de todo Edimburgo, especialmente del castillo. El recorrido arranca al final de Princess Street y asciende a través de estrechos senderos hasta la cima. Allí, se puede observar perfectamente la ciudad nueva, las zonas comerciales, el Hotel Balmorai, los jardines del castillo y Leith Street. De los monumentos que se encuentran en la colina merece la pena el National Monument, réplica del Partenón de Atenas que tuvo que interrumpir su construcción.

¿Qué comemos?

Escocia es un lugar perfecto para saborear una buena cerveza y en especial, un buen whisky. Se suele tomar solo con hielo o con un poco de agua, estando mal visto mezclarlo. Para comer, son muy característicos los Haggis. Este contundente plato combinado está compuesto por una especie de morcilla formada por hígado, corazón y pulmones de cordero embutidos en la piel del estómago del animal y cocinados durante varias horas. Se sirve acompañado de patatas y puré. Además del Haggis, también son típicos los pescados (arenque ahumado, merluza, marisco,…), las carnes como la codorniz (Grouse), la sopa de cordero (Scotch broth) o las galletas de avena y mantequilla.

¿Qué hacemos?

Volar a Edimburgo es perfecto para una escapada corta, pero si cuentas con más días puedes aprovechar y disfrutar de los otros rincones que pone a tu alcance. Algunas de las excursiones más cercanas son Sterling y el mítico Saint Andrews. Además, está bien comunicada con otra gran ciudad: Glasgow. Sin embargo, si has puesto pie en Escocia no puedes perderte en las Highlands visitando el Lago Ness, Inverness, Fort William e incluso la Isla de Skye. Durante tu viaje aprovecharás para contemplar el verde paisaje y descubrir montones de castillos. SI prefieres no salir de Edimburgo, también puedes visitar The Georgian House, Holyrood Park o el Jardín Botánico.