Verona

La Arena

La Arena

La Arena

Junto con el Coliseo de Roma y la Arena de Capua, es uno de los anfiteatros más grandes de Italia. Tiene una capacidad para 25.000 espectadores y actualmente acoge todo tipo de eventos cada verano. Su forma elíptica tiene 152 metros de largo y 123 de ancho y su fachada de caliza blanca y rosa de Valpolicella. Inicialmente estaba fuera de la ciudad y acogía espectadores de localidades cercanas.

Castelvecchio

Este complejo medieval con influencia gótica y siete torres construido en el siglo XIV. Inicialmente rodeado por un foso, fue simultáneamente residencia y fortaleza y acoge en su interior los Museos Cívico y de Arte. Es una agradable sorpresa entre los monumentos de la ciudad.

Casa de Julieta

Casa de Julieta

Casa de Julieta

Sin duda, una de las grandes atracciones de la ciudad y la primera imagen que tenemos antes de viajar a Verona. Este edificio del siglo XIII era el palacio Capuleto según cuenta la tradición. Los personajes de Shakespeare eran ficción, pero en las calles de Verona toman más vida que nunca. En el patio de la casa podremos encontrar la estatua de Julieta y el famoso balcón, que fue añadido en 1928. La tradición dice que hay que tocar el pecho derecho de la amada. Si después de visitar la casa queremos seguir conociendo la historia, podemos visitar la tumba de Julieta en el Museo de los Frescos donde al igual que en la casa, hay repartidos flores y mensajes de amor de los turistas.

Duomo

Duomo

Duomo

La agrupación de edificios eclesiásticos completa está formada por el Batisterio, la Iglesia de Santa Elena y el Claustro. En ellos encontramos detalles artísticos de los siglos XII, XIII al XVI, como por ejemplo, su campanario. Fue construida sobre las ruinas de dos iglesias paleocristianas y levantadas de nuevo modificando su estructura con el paso del tiempo.

Piazza delle Erbe

Este punto era la antigua situación del foro romano y es uno de los ejes de la vida en Verona. De forma rectangular, está rodeada por edificios de interés arquitectónico y es un lugar muy turístico, lleno de comercios y redtaurantes. Además, por las mañanas cuenta con un mercadillo.

Torre dei Lamberti

Torre dei Lamberti

Torre dei Lamberti

Localizada en la plaza anteriormente citada y con 84 metros de altura, esta torre medieval es el mirador de Verona. Fue construida entre los siglos XII y XV y restaurada posteriormente debido al impacto de un rayo. Cada una de sus fases de construcción puede observarse en los materiales del edificio. En 1779 se le añadió el reloj a la cima, que podemos alcanzar mediante escaleras o ascensor. Como curiosidad, cuenta con dos campanas, la primera de ellas se llama Rengo y estaba dedicada al llamamiento a la reunión por parte del pueblo. La segunda, Marangona, para alertar en caso de incendio e indicar las horas del día.

¿Qué comemos?

Si hay una cocina verdaderamente internacional, es la italiana, y por ello merece la pena volar a Verona y cualquier sitio del país. Por supuesto, la pasta y la pizza son un excelente comienzo pero hay otros platos excelentes. En la región es famoso el arroz en su variedad Vialone para elaborar rissottos al Amarone, a la achicoria o con espárragos. También merece la pena probar la Polenta, un potaje de maíz. Son muy típicas las carnes de pato, gallina y la médula de buey llamada Peverada. Entre los platos recomendados se encuentran el Peperate (carne roja cocinada en salsa de queso), gnocchi con manteca, bigoli (pasta con sardinas) o Patissada de caval (carne de caballo con vino tinto). El dulce más popular es el Panettone y los natalini junto al tradicional tiramisú.

¿Qué hacemos?

Hay distintos momentos del año en los que Verona se engalana. Como ciudad romántica, el primero no podía ser otro que San Valentín y los eventos de “Verona In Love” que tienen lugar cada mes de febrero: mercados, exposiciones, decoración,… La Arena también acoge el Festival Lírico durante el verano y se celebra desde 1913. En la Navidad, la Plaza Bra cambia de aspecto y es el día 13 de diciembre cuando aprovechando Santa Lucía, patrona local, más se celebra. Por supuesto, los distintos mercadillos salpican la ciudad. Además, gracias a su situación Verona te permite realizar excursiones a otras regiones como Venecia, Milán o el espectacular Lago Garda.