Las Palmas

Tu visita a la isla de Gran Canaria merece una parada en la capital. Allí recorrerás el barrio de Vegueta, el más característico por su arquitectura tradicional y sus calles empedradas. En él se encuentran también la plaza y la catedral de Santa Ana. A través de la calle Mayor de Triana te adentrarás en la zona comercial y en cualquier local de las plazas de Hurtado de Mendoza o Cairasco podrás probar las emblemáticas papas arrugás con mojo. Además, es imprescindible que te des un baño en la playa de Las Canteras, y si viajas con niños, les darás una alegría visitando el Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología.

Roque Nublo

Roque Nublo

Este Monumento Natural desde 1987 es uno de los elementos más representativos de las panorámicas de la isla. Su origen es volcánico y tiene una altura de 80 metros sobre su base y más de 1.800 sobre el mar. Antiguo lugar de culto aborigen, conserva su condición de símbolo de la isla y se puede acceder previa caminata salpicada de paisajes increíbles.

Bandama

Bandama

En Gran Canaria hay muchos lugares impresionantes que no te puedes perder además de admirar sus paisajes a través de la red de miradores. Dos de ellos es la Caldera y el Pico de Bandama. A través de una sinuosa carretera entre viñedos llegarás a este cráter volcánico de un kilómetro de diámetro y doscientos metros de profundidad. Toda la zona está cubierta de vegetación y se puede descender en alrededor de media hora a través de un sendero. De todas formas, la mejor perspectica del cráter la tendrás desde el Pico Bandama, de casi 600 metros de altura y desde cuya cima se puede divisar las costas cercanas.

Teror

Teror

Este municipio no es sólo de los lugares más bellos de la isla sino que también es un punto esencial para todos sus habitantes debido a que acoge la Basílica a la Virgen del Pino, patrona local. Por supuesto, la visita al templo es imprescindible para cualquiera que decida viajar a Gran Canaria. Allí conoceremos el altar mayor, las vidrieras y los retablos. El centro de la actividad es la plaza, caracterizada por los típicos balcones de la arquitectura canaria. Otro lugar emblemático de Teror es la Fuente Agria, compuesta por tres manantiales, la Finca de Osorio o la Caldera de Pino Santo. Además, es un punto de referencia para la actividad comercial por su mercadillo de los domingos y la gastronomía.

Dunas de Maspalomas

Dunas Maspalomas

Además del mar que baña la costa, puedes sumergirte en el mar de arena de la Reserva Natural de las Dunas de Maspalomas. Están formadas por tres zonas muy diferentes, el Palmeral, la Charca y las Dunas, que constituyen una zona de excepcional riqueza natural. Al visitarlas, observarás cómo moldea el viento del océano los campos de dunas y verás a las aves migratorias descansar en la Charca, un oasis en su largo viaje hacia África.

Las Playas

Playas de Gran Canaria

El muestrario de playas que te brinda Gran Canaria es enorme. En total cuenta con 60 kilómetros de playas, que gracias al clima suave de la isla podrás disfrutar en cualquier época del año. Una de las más conocidas es la de Maspalomas, con su larga lengua de arena desde la playa del Inglés hasta el Gran Faro. Otras playas destacadas, al sur de la isla, son la de San Agustín, la de Amadores y la del puerto de Mogán.

¿Qué comemos?

Las carnes más usadas en la gastronomía de Gran Canaria son el cabrito, la ternera, el cerdo y el pollo. En cuanto a pescados, el cherne, el atún, o el mero y no hay un día que falte materia prima en la mesa. Aprovechando nuestra visita a la isla podemos degustar los tollos en salsa que consisten en cría de tiburón desalado y condimentado. También son típicas las caracajas (hígado con salsa) o la ropa vieja. Pero de todos ellos, el más reconocible es el sancocho canario: cherne, papas, batata y pella de gofio. Otra de sus tradiciones son el enyesque, aperitivos variados como las papas o las aceitunas aliñadas, o bien los quesos, muy diversos y variados en su elaboración.

¿Qué hacemos?

Pese a la resaca navideña, el Carnaval es el que pone arranque al año en Gran Canaria y la excusa de muchos para volar a Gran Canaria. Son las fiestas más populares y se inician desde mediados de febrero hasta prácticamente abril. A partir de entonces, el mejor clima anuncia casi una fiesta cada mes en alguna localidad de la isla. Son fiestas tradicionales que se han heredado con el paso de los siglos y que recuerdan el origen local. La última semana de abril el municipio de Guía celebra la Fiesta del Queso; el primer domingo de octubre, Valleseco las Fiestas de la Manzana; o la Romería de los Labradores en diciembre en Santa Lucía, son sólo algunos de ellas. Además, por las condiciones de la isla los amantes del deporte acuático, turismo rural y senderismo encontrarán multitud de actividades en Gran Canaria.