Microsoft claudica y abrirá su software a sus rivales
La Comisión Europea (CE) anunció ayer un acuerdo por el que la multinacional se compromete a ceder información técnica de sus programas informáticos a sus competidores, tal y como le exigía Bruselas. La disputa legal entre Microsoft y la UE, iniciada a raíz de una denuncia de Sun Microsystems (competidor de la empresa estadounidense), duraba ya nueve años.
Microsoft se rinde. El gigante informático no recurrirá la sentencia dictada por el Tribunal de primera Instancia de la UE en septiembre pasado, que supuso un fuerte varapalo para la empresa y reforzó las tesis de Bruselas, al ratificar la multa récord de 497 millones de euros que le había impuesto la CE tres años antes por prácticas monopolistas.
La compañía se negaba a divulgar datos clave para que otras empresas de software pudieran desarrollar productos compatibles con su sistema operativo Windows, que utiliza el 95% de los usuarios.
A esa sanción se unió otra el año pasado, por importe de 280 millones, ante la negativa de Microsoft a dejar de "aprovecharse de su situación en el mercado para perjudicar a los consumidores", en palabras de la comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes. Hasta ahora, Microsoft aseguraba que garantizaba la "interoperabilidad" de Windows.
Acumulación de multas
En total, la empresa que preside Bill Gates ha pagado ya multas por importe de más de 700 millones de euros.
A esa cifra habrá que sumar una nueva sanción por el retraso en acatar las órdenes de Bruselas, cuya cuantía se decidirá "lo más pronto posible", según dijo ayer Kroes. En principio, la multinacional estadounidense debería desembolsar 3 millones de euros diarios, a contar desde 2005 hasta ayer.
La comisaria europea aseguró que la nueva actitud de Microsoft propiciará cambios que "afectarán profundamente a la industria del software" y tendrán repercusiones en el sector "durante años".
Código abierto
Principalmente, Microsoft acepta facilitar información técnica sobre servidores de trabajo en grupo a los fabricantes que desarrollan programas en código abierto, como el popular Linux (un sistema operativo como el de Microsoft, pero gratuito), para que puedan crear productos compatibles con Windows.
Además, los derechos que se paguen por esa información se reducirán a un pago único de 10.000 euros, y los royalties que se paguen por una licencia a nivel mundial que incluya patentes bajarán del 5,95 al 0,4% de los beneficios que obtenga con ella la compañía compradora, frente al 7% solicitado inicialmente por la empresa estadounidense.
La comisaria holandesa recordó que Microsoft tendrá que seguir facilitando información sobre sus nuevos productos, como el sistema operativo Windows Vista, y los que desarrolle en el futuro.
Las negociaciones entre la compañía estadounidense y la UE han estado encabezadas por la propia Kroes y por el consejero delegado de Microsoft, Steve Balmer y arrancaron tras la sentencia de septiembre pasado.
Al cierre de esta edición, las acciones de Microsoft ganaban un 1,69% en el índice neoyorquino de valores tecnológicos (Nasdaq).