El BBVA obtuvo un beneficio neto de 1.005 millones de euros en el primer trimestre de 2012, un 12,6% menos que en el mismo periodo de 2011.

Según ha explicado el banco a la CNMV, la generación orgánica de capital le ha permitido cumplir antes de tiempo las recomendaciones de la Autoridad Bancaria Europea (EBA) y alcanzar un ratio del 9% en el capital de máxima calidad, "sin vender activos estratégicos ni aceptar ayudas públicas".

Sin embargo, el banco aún no ha realizado las dotaciones a provisiones que exige el Gobierno para sanear la cartera inmobiliaria, que en el caso del BBVA suman unos 1.500 millones de euros y que se irán realizando "en los próximos trimestres", informaron fuentes de la entidad.

La tasa de morosidad quedó congelada en el 4%, algo inferior al 4,1% que registró en marzo de 2011, en tanto que su ratio de cobertura ante insolvencias fue del 60 %, frente al 61 % de un año antes.

Estas cuentas se han visto favorecidas un trimestre más por la diversificación geográfica del grupo BBVA y por el impulso de los países emergentes, en un trimestre en el que la aportación de España al beneficio cayó el 52,2%, hasta 229 millones.

Según precisó la entidad, el mayor esfuerzo en saneamientos realizado en este periodo y los ROF (resultados por operaciones financieras) explican en parte esta caída.

En España, la mora se situó en el 4,9% a finales de marzo, con una cobertura del 43%.

La cartera de crédito a la clientela del Grupo aumentó el 3,4% interanual, hasta los 358.507 millones, gracias "al dinamismo de las economías emergentes", mientras los depósitos se redujeron el 1,8 % y quedaron en 278.445 millones.

Saneamientos crediticios

Según la entidad, los saneamientos crediticios e inmobiliarios se mantuvieron "estables" este trimestre y sumaron 1.297 millones de euros.

En cuanto a los principales márgenes de la cuenta, el de intereses se situó en 3.597 millones de euros, el 13,3% más, en tanto que el bruto creció el 3,5% y sumó 5.447 millones.

Por el contrario, el margen neto retrocedió el 1,5% y quedó en 2.862 millones después de descontar unos gastos de 2.585 millones (el 9,5% más), debidos en su mayor parte "a la inversión en países emergentes", así como unas amortizaciones de 232 millones, superiores a los 196 millones dedicados a este fin en marzo de 2011.

Por áreas geográficas, Eurasia, que incluye las participaciones en China Citic Bank (CNCB) y el banco turco Garanti, vio crecer el beneficio neto el 51,7 %, hasta 299 millones, mientras en México, BBVA Bancomer ganó 430 millones, apenas el 0,5% más.

En América del Sur el beneficio fue de 370 millones, el 33% más, en tanto que en Estados Unidos el grupo obtuvo un beneficio de 115 millones, el 21% más y Actividades Corporativas generó unas pérdidas de 438 millones, superiores a los 327 millones que perdió un año antes.