La otra cara de las multas por exceso de velocidad
El grupo BFi Optilas es el proveedor líder en España en sistemas para vigilancia de peajes y control de velocidad en carreteras
Puede que su nombre no suene de nada. Pero sus equipos y sistemas han captado la imagen de millones de españoles. Sus cámaras de alta velocidad consiguen la prueba definitiva contra los infractores en carretera. "Montamos componentes en los radares de tráfico para controles de velocidad y de peajes", explica Álvaro Gil López, responsable de desarrollo dentro de BFi Optilas en España.
La empresa, fundada en Francia en 1955 y con presencia en 14 países, lleva más de 20 años en el mercado español. BFi Optilas es mucho más que un proveedor de chivatos de alta tecnología. Sus sistemas permiten, por ejemplo, controlar la ventilación dentro de un túnel o analizar de forma automática y en tiempo real cualquier incidencia en una carretera.
Sus sistemas integrados de vigilancia y control de edificios están presentes en transportes públicos, hospitales, polígonos industriales y edificios de oficinas por toda España. "Ahora, los ayuntamientos están demandado sistemas de vigilancia urbana, incluyendo el reconocimiento de matrículas para restringir el acceso a las zonas céntricas", afirma María del Carmen Sánchez, responsable de negocio de la división de imagen de la compañía.
Diversificar
BFi Optilas tiene unos 75 empleados en España, en sus oficinas de Madrid, Barcelona, Sevilla y Canarias. "En el año 2004 éramos líderes en la distribución de circuitos cerrados de TV en España y se planteó la necesidad de ampliar la gama de productos. Así hemos entrado en áreas como la detección de incendios o sistemas para el control de huertos solares", señala Gil López. De hecho, la división dedicada a la seguridad nació en España y ahora sirve de modelo para el resto de países en los que está presente el grupo.
En 2007, BFi Optilas, que cuenta con más de 320 empleados en toda Europa, facturó más de 19 millones de euros y su objetivo es alcanzar los 25 millones este año. El grupo desarrolla, entre muchos otros productos, cámaras capaces de tomar un millón de imágenes por segundo, que resultan útiles, por ejemplo, para probar el funcionamiento de sistemas de airbag.
Crecer con los mayores
Dentro de su estrategia de crecimiento, el grupo intenta entrar en uno de los segmentos de mercado que presenta un mayor potencial: el de los servicios asistenciales a personas de edad avanzada. Han desarrollado un sistema integral para gestionar de manera remota todas las instalaciones de una residencia para mayores.
"Permite controlar la iluminación, climatización, videovigilancia, detección de incendios, comunicación y localización de personas", afirma Enrique Serrano, responsable del proyecto. El sistema, bautizado como Geriasys, pretende que los centros puedan ahorrar energía y mejorar sus prestaciones. "El sistema permite ahorrar hasta un 10% en la factura energética de cualquier centro", añade Serrano.
Cómo mejorar un proceso con 5.000 años de historia
BFi Optilas ha decidido llevar la innovación a uno de los sectores más tradicionales, el de la fabricación de vino. La compañía ha lanzado un sistema integral para la gestión de bodegas. "Permite aumentar la producción y garantizar la calidad del vino, respetando siempre los procesos del cliente", explica Rocío Cano, responsable del proyecto.
En lugares como Australia y California, la tecnología se ha ido incorporando de forma rápida a los procesos de producción vitivinícola, pero en Europa, donde la tradición tiene más peso, esta entrada es más lenta. El sistema puesto en marcha por BFi Optilas controla la temperatura, la ventilación y la humedad en la bodega. "El enólogo, incluso desde la distancia, puede mantener en todo momento el control sobre la explotación", afirma Cano. BFi Optilas está a punto de poner en marcha el sistema con un primer cliente.