Archivo de Público
Martes, 31 de Agosto de 2010

Caen las peticiones colombianas de asilo

Miles de amenazados piden auxilio durante la escala en Madrid del vuelo Bogotá-Tel Aviv. CEAR denuncia que España obstaculiza las solicitudes, que han descendido un 90% en dos años

DANIEL AYLLÓN ·31/08/2010 - 07:30h

Sandra, colombiana de 32 años, no podía imaginar que el apoyo que dio su país a Israel en la Guerra de los Seis Días, de 1967, le fuese a salvar la vida 43 años después. Amenazada de muerte por los paramilitares desde hace cinco años, se sirvió de las buenas relaciones de su Gobierno con Israel para tomar, en marzo de 2009 y sin necesidad de visado, el vuelo que une Bogotá (Colombia) y Tel Aviv (Israel), con escala en Madrid. A ojos de la compañía aérea, Iberia, era una simple turista. Al aterrizar en la capital española, se dirigió al primer policía que vio y le dijo: "Quiero solicitar asilo y un abogado de CEAR".

"Me quitaron el pasaporte y me encerraron tres días en una sala. Es traumático llegar con problemas a otro país y que te traten como a una delincuente. Pero es lo que toca y lo importante es conservar tu vida", reflexiona Sandra, que sigue viviendo en España, a la espera de que el Ministerio del Interior responda a su solicitud de asilo. El vuelo IB-3752, el que llega a Israel, ha dejado a miles de colombianos más en Madrid en la última década.

La imposición del visado en 2001 redujo las llegadas drásticamente

El último recurso

A partir de 2003, la ruta se erigió casi como "la única alternativa posible para los solicitantes de asilo colombianos", explica Mauricio Valiente, coordinador del servicio jurídico de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR). El jurista lamenta que las mafias sacaron "tajada" del vuelo, organizando packs para emigrar a España haciendo pasar a inmigrantes por posibles refugiados.

La llegada de solicitantes tuvo su máximo apogeo en 2007. Aquel año, cientos de los 2.498 colombianos que pidieron asilo llegaron por la ruta Bogotá-Tel Aviv. Entonces, Interior "endureció" las condiciones y los controles de entrada, denuncia Valiente. Como consecuencia, las solicitudes cayeron un 90% en dos años, hasta las 247 (2009).

La nueva Ley de Asilo acota la posibilidad de pedir refugio en España

Antes, en 2001 y para frenar la llegada de inmigrantes, España había impuesto un visado a los colombianos que quisiesen viajar. "La consecuencia fue un primer desplome del número de solicitantes del 80% en dos años", remarca.

Los amenazados podían entonces pedir refugio en la embajada española, "pero, con la reforma de la Ley de Asilo de 2009, esta vía ha desaparecido. Ahora, depende del criterio de cada embajador, no sólo de la ley", critica Valiente. El único camino regulado que hay en la actualidad es pedir a la embajada que traslade al solicitante a la Península para demandar asilo en España. "El Gobierno se ha centrado en controlar las fronteras y ha perdido atención a la protección internacional", añade Valiente.

Pese al aumento de las trabas, el vuelo a Israel sigue siendo la única forma de llegar a España para muchos demandantes. Es el caso de José Luis, de 34 años, que perdió a su padre, primero, y a su padrastro, después, asesinados por los paramilitares. En 2004, conoció la posibilidad de escapar de las matanzas de su provincia en el vuelo comercial. Llegó a España con su mujer, hermana e hijo y, aunque le denegaron su petición en 2008, se quedó. "No volveré. Allí no se persigue a una persona, sino a toda su familia", asegura.