Eli Lilly detendrá el desarrollo de uno de sus tratamientos experimentales para etapas avanzadas del Alzheimer, después de que resultados preliminares determinaran que el fármaco se relaciona con el empeoramiento de los pacientes.

La paralización del desarrollo de Semagacestat anunciado por Lilly el martes es un duro golpe para la farmacéutica y para el tratamiento contra la enfermedad degenerativa del envejecimiento.

Los resultados preliminares surgieron de dos estudios prolongados de Fase III, en los que el Semagacestat fue comparado con placebo en más de 2.600 pacientes con una condición leve a moderada de Alzheimer.

Un análisis provisional de los estudios mostró que los pacientes que tomaron Semagacestat empeoraron con respecto a la cognición y a la capacidad de realizar tareas cotidianas a un grado estadísticamente significativo, frente a los pacientes que recibieron placebo.

Además, los números mostraron que el Semagacestat estaba asociado con un aumento en el riesgo de padecer cáncer a la piel.

La compañía dijo que la decisión no afecta las pruebas clínicas que se están realizando con el Solanezumab, su otro fármaco en estudio de Fase III, que también se está desarrollando como un posible tratamiento contra el Alzheimer.

Lilly dijo que espera recibir un cargo para el tercer trimestre de entre 0.03 y 0.04 dólares por la paralización, aunque mantuvo su previsión de utilidades para el 2010.