PÚBLICO - Cristóbal Montoro.

El Partido Popular quiere más flexibilidad para las empresas en el decreto de la reforma laboral. En sus enmiedas, los conservadores proponen facilitar a las sociedades el descuelgue de los convenios colectivos firmados para no tener que cumplirlos. Cuando no haya acuerdo entre la empresa y los trabajadores y se den las "causas económicas, técnicas, organizativas o productivas" que justifiquen ese descuelgue, la Comisión Consultiva Nacional de Convenios Colectivos o un órgano autonómico podrá autorizarlo.

Mientras, CiU, quiere reforzar el absentismo como causa objetiva de despido y propone extinguir un contrato si el empleado falta al trabajo, aun con justificante, un 20% de los días hábiles en dos meses o el 25% en cuatro meses discontinuos del mismo año. Asimismo, pretende eliminar la autorización de la autoridad laboral a los expedientes de regulación de empleo (ERE).

IU, por su parte, pide que, para despidos por causas objetivas, las empresas demuestren tres años de evolución negativa y pérdidas. Solicita también una indemnización de 20 días por año trabajado para los contratos temporales y que se penalice todo uso fraudulento de este tipo de contratación.

El PSOE presentó 15 enmiendas que no suponen grandes cambios en la reforma.