Paco Nieva dirige por primera vez su obra 'Tórtolas'
El dramaturgo estrena su obra 'Tórtolas, crepúsculo y... telón', un homenaje a las vanguardias, este jueves en el teatro Valle-Inclán de Madrid

El autor teatral Francisco Nieva. EFE
Tórtolas, crepúsculo y... telón nunca fue estrenada cuando el dramaturgo y escenógrafo Paco Nieva (Valdepeñas, 1924) la escribió en 1952. Tampoco después, ya en el tardofranquismo. Nieva estaba proscrito. Una llamada de Carmen Polo cortó de cuajo el premio Lope de Vega que estaba destinado al dramaturgo por esta obra. Ella prefería a un miembro de los Calvo Sotelo.
Casi sesenta años después de su escritura, Paco Nieva, uno de los autores más galardonados en los últimos años, dirige por primera vez esta obra en el Teatro Valle-Inclán de Madrid dentro de la programación del Centro Dramático Nacional.
El director del CDN, Gerardo Vera, le animó para que dirigiera otro de sus textos, pero el dramaturgo se aferró a su decisión de representar Tórtolas.
El motivo es que este texto es la "declaración de principios" sobre lo que para Nieva representa el teatro: "Un reflejo distorsionado de la realidad. La verdad se muestra a través de la mentira que es el teatro", definió ayer el dramaturgo. Esta obra es, por tanto, un homenaje a la vanguardia de la que se siente heredero (desde Artaud a Bretón, Berg o Buñuel) y que él considera ya "una vanguardia clásica".
En una obra llegué a matar a mi madre imaginariamente
No ha retocado mucho del texto, ya que cuando la escribió "tenía más talento que ahora. Era más atrevido y más sinvergüenza", aseguró. También alertó de que el público de hoy verá la obra "como un perfume de algo antiguo, pero eso me gusta, porque las cosas que tienen valor tienen su fecha de caducidad".
Para este montaje, Nieva ha contado con actores con los que ya ha trabajado en otras ocasiones como Jeannine Mestre
y Esperanza Roy. "Mis personajes son singulares y están interpretados por personajes singulares", señaló Nieva. Roy comentó, acerca de la forma de dirigir de Nieva que "hay que ser muy sufridora, pero también hay que hacerle sufrir a él".
El dramaturgo, que ya ha cumplido los 85 años, contó que si algo le animó a seguir escribiendo durante la época en la que vivió fuera de España fue el propio dictador Franco. "Yo escribía contra él", afirmó. Siempre fue un escritor crítico. "Hasta con mi familia. De hecho, en una obra llegué a matar a mi madre imaginariamente", concluyó con sorna.