Zelaya y Calderón antes de la entrevista que ambos han mantenido para analizar la situación en Honduras. AFP

El presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, parece haber ocnseguido el apoyo que le faltaba en Latinoamérica. Antes de reunirse con el máximo mandatario mexicano, Felipe Calderón, éste hizo un llamamiento para que se encuentre una solución a la delicada situación que vive el país hondureño después del golpe de Micheletti y la expulsión del país del propio Zelaya.

Calderón, que hasta ahora no había querido expresar en público su apoyo a Zelaya, consideró "inaceptable" la situación que vive Honduras y exhortó a las partes en conflicto a que encuentren "con urgencia" fórmulas que "permitan resolver el problema".

"Hoy más que nunca es imperativo que prevalezca la fuerza del derecho y no el derecho de la fuerza", sostuvo Calderón durante la ceremonia de bienvenida del presidente depuesto hondureño, Manuel Zelaya, celebrada en la residencia oficial de Los Pinos, en la capital mexicana.

Aparte de esta visita a México, Zelaya tiene previsto desplazarse en los próximos días a Brasil para recabar el apoyo de Lula.

Más presión de EEUU

Ayer, en una entrevista para la cadena venezolana Telesur, Zelaya pidió más apoyo a EEUU: "Estados Unidos ha tomado acciones. De repente no son suficientes todavía y habrá que endurecer todavía más esas acciones igual que el resto de países de América".

Asimismo, el presidente depuesto dijo que la economía depende e EEUU "en gran medida, en un 70 u 80 por ciento", y estimó que un poco de presión en sentido comercial sería suficiente para acabar con la postura de Micheletti.