efe - La plantilla del Inter Movistar posa con el título.

El Inter Movistar amplió su dominio en el fútbol sala nacional tras imponerse en la final de la Supercopa de España a un digno Caja Segovia por 3-4, en el encuentro disputado en el pabellón Pedro Delgado ante 4.000 espectadores que abarrotaron las gradas del municipal segoviano.

El Inter, que en las semifinales del torneo ganó al Benicarló por 5-2, se puso por delante en los primeros cinco minutos de partido tras dos acciones eléctricas iniciadas por Borja y finalizadas por Schumacher, frente a un conjunto local que se veía agarrotado por los nervios de disputar una final, y que apenas pudo superar de forma clara la férrea defensa del equipo alcalaíno.

Cuando todo apuntaba a que al descanso se llegaría con el 0-2 en el electrónico, Daniel, a medio minuto del final de la primera parte, marcó el tercer tanto del Inter que le ponía las cosas casi imposibles al anfitrión de la Supercopa.

Funcionó el portero-jugador

Sin embargo, el conjunto de Miguel Rodrigo se mantuvo dentro del partido, y poniendo en práctica el sistema del portero-jugador, marcó dos goles que pusieron el encuentro en un pañuelo en los últimos compases.

Pero el cansancio terminó de hacer mella en los locales, que llegaron a la final tras superar a ElPozo Murcia por 7-4 en una durísima semifinal, y Torras marcó el 2-4 que hizo imposible la remontada segoviana, por más que Miñambres anotara el 3-4 a treinta segundos de la conclusión. Un gol que sólo llevó la emoción a la grada.