«Un escritor no puede cambiar el mundo»
Gao Xingjian abrió ayer Kosmopolis con un debate sobre los abusos de poder
Gao Xingjian piensa que la ilusión no sirve para nada y que lo único útil es afrontar la realidad. Uno de los escritores malditos de China considera que la función social del arte es una utopía. “Un escritor no puede cambiar el mundo. Se trata de una ilusión utilizada como propaganda política. Pero lo que el artista sí puede hacer es alzar la voz de la conciencia”, afirmó a Público el premio Nobel de Literatura en el año 2000, frente a uno de los lienzos que integran Después del diluvio, la exposición que acompaña al artista en su paso por Barcelona. En ella ha utilizado, según él mismo asegura, una técnica pionera: tinta china sobre tela.
El autor de La montaña del Alma inauguró ayer Kosmopolis 2008 con una conferencia sobre la defensa de la libertad creativa frente a los abusos de poder. Vestido con un traje negro de lana, consciente de ser uno de los participantes dentro del apartado Escritores para el cambio –eje central del certamen literario–, insistió en que “los creadores no deben jugar el papel de los políticos, sino mostrar la realidad con todas sus dificultades”.
Censurado en la China
“Me siento conmovido con la atención que Barcelona me dedica”, expresó tímidamente el escritor que sigue censurado en China. “Pienso que en Occidente todo el mundo sabe lo que ocurre en China. Un país que está muy lejos de alcanzar la democratización y la libertad de expresión”, contó sin amargura.
Desde que Xingjian condenó la matanza de la plaza de Tian’anmen, las autoridades chinas le cerraron las puertas. Entonces, se afincó en París y goza de la nacionalidad francesa. Por el momento, no tiene ninguna intención de participar oficialmente en la Feria de Frankfurt 2009, donde China es el país invitado. Crítico con su país natal, Xingjian estima que “la incursión del capitalismo afectará a la cultura tradicional china, porque la política y el mercado matan a la literatura”.
Angustiado por el futuro
Aficionado a la literatura, el teatro y la pintura desde niño, con el tiempo se ha convertido en un autor prolífico amante de diversas disciplinas. Una característica habitual en China, donde “lo de ser artista no se considera una profesión, sino una distinción”. Xingjian huye de corsés y también coquetea con el cine. Hoy presenta su primera película, que lleva el mismo título que la exposición: Después del diluvio. Una producción sin espíritu comercial, que guardaba en mente desde su juventud y que define como “cine poema”.
La cabecera con doble uso sirve al autor para transmitir la angustia que siente por el futuro del planeta. “El calentamiento global es un problema no resuelto, fruto de la tontería humana”, afirmó con rotundidad. En las obras repartidas entre la Fundación Círculo de Lectores y la Galería Senda, el visitante se encuentra con paisajes devastados, soledad y deformaciones que transmiten vacío.
¿Amanecerá después del diluvio? A esta pregunta Gao Xingjian responde tajante: “De momento no hay salida. El cambio climático no para. El nivel del mar sube. No sabemos que sucederá dentro de 20 años. Por eso, en los lienzos expreso angustia, una señal de alarma”.
ARTISTA COMPLETO
Cineasta, poeta, pintor, novelista...
'TEATRO Y PENSAMIENTO'
El último libro de Gao Xingjiang, ‘Teatro y pensamiento’ (El Cobre/Círculo de lectores), presenta varias obras de teatro que el autor escribió en francés, una ópera, un libreto para un espectáculo de danza, un poema y dos ensayos sobre cine y teatro.
'DESPUÉS DEL DILUVIO'
Título que el autor ha utilizado para bautizar los lienzos de gran formato que pintó este verano con tinta china y, también, para nombrar su primera producción audiovisual.
'LA HUIDA'
Pieza teatral en la que el autor, más allá de recrear la rebelión de los estudiantes en Tian’anmen, invita a reflexionar sobre la soledad, la libertad y el papel de la mujer.