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Martes, 2 de Septiembre de 2008

Colonial, cerca de cerrar un acuerdo sobre deuda, según fuentes

Reuters ·02/09/2008 - 20:53h

Colonial está próxima a lograr un acuerdo con sus acreedores para reestructurar su deuda que podría incluir una futura inyección de capital de sus principales accionistas y la venta de algunos activos, dijo el martes a Reuters una fuente próxima a la operación.

"Se está moviendo en la dirección correcta", dijo la fuente.

Un portavoz de Popular señaló sin embargo que el banco no contempla inyectar capital en la inmobiliaria.

"Popular no está contemplando participar en una ampliación de capital de Colonial", dijo un portavoz de la entidad, que tiene un 9,15 por ciento del capital de la inmobiliaria.

El acuerdo sobre la refinanciación deberá contar con el visto bueno de los principales acreedores de Colonial --Goldman Sachs, Eurohypo, Calyon y Royal Bank of Scotland--. El lunes, la compañía dijo que había alcanzado un "principio de acuerdo no vinculante", aunque no dio mayores explicaciones.

Un portavoz de Colonial no hizo más comentarios.

"La única manera de lograr un acuerdo es si la gente cede", dijo la fuente, añadiendo que las negociaciones durante el verano habían sido tensas porque los acreedores querían que la compañía fuera más proactiva.

El acuerdo, que se espera se cierre en las próximas semanas, también es probable que incluya la venta de activos como SFL, la división francesa que la compañía no consigue vender debido a que las ofertas son inferiores a las previstas, dijo la fuente.

Colonial tiene también una participación del 15 por ciento en FCC, aunque su venta implicaría enormes minusvalías en este momento.

"Tienen que ser realistas", dijo la fuente.

Las acciones de la inmobiliaria, que el lunes se dispararon ante las noticias de avances en las negociaciones de refinanciación, cerraron el martes con alza del 2,7 por ciento a 0,38 euros.

ACTIVOS EN REBAJAS

Una fuente próxima a la compañía dijo que el grupo ya asume ventas de activos a menores precios dada la situación del mercado, que ya tuvo su reflejo en las valoraciones incluidas en los resultados a junio.

"En época de crisis, los buitres planean. El que vende activos ahora, pierde dinero", dijo la fuente.

En Madrid, una fuente de un banco de inversión coincidió en que Colonial está "realmente en una situación complicada. Si miras los resultados del primer semestre, los ingresos están siendo engullidos por los costes financieros y operativos (...) No está entrando dinero".

"Pero creo que los acreedores trabajaran a contrarreloj para salvar la situación. No es de su interés que Colonial se hunda", dijo la fuente.

"La venta de activos es obviamente una forma de lograr efectivo, aunque la venta del 15 por ciento que Colonial tiene en FCC sería la última opción, creo, dadas las pérdidas masivas de capital que implicaría", añadió.

Una fuente de los mercados financieros se mostró escéptica sobre que Popular esté en la posición para inyectar más efectivo en Colonial para salvarla del hundimiento, dado el impacto que ya tiene en su capital la morosidad relacionada con el sector inmobiliario.

La tasa de morosidad de Popular alcanzó a finales de junio el 1,42 por ciento y el banco estimó que ésta subiría al 2 ó al 2,5 por ciento a finales del año.

"Es más probable que Popular necesite aumentar capital en el corto plazo para contrarrestar la erosión en su base de capital", dijo la fuente de los mercados financieros, extremo que fue negado por el banco.

Colonial, al igual que otras inmobiliarias españolas como Reyal Urbis o Habitat, está a merced de sus acreedores, que han extendido waivers o aplazamientos de pago temporales mientras intentan acordar nuevos términos de refinanciación en un contexto de endurecimiento crediticio internacional y crisis inmobiliaria y económica nacional.

Martinsa Fadesa, la mayor promotora del país, se convirtió en la primera gran víctima de la crisis en julio cuando solicitó voluntariamente acogerse a situación concursal al verse incapaz de hacer frente a una deuda de más de 5.000 millones de euros.

/Por Elena Moya/