Los ecologistas contra el túnel bajo el Pardo
El cierre de la M-50 se hará con subterráneos a más de 30 metros de profundidad

Túnel de la M-50.
Una tuneladora perforará las tripas del monte del Pardo a lo largo de 11 a 13 kilómetros. Será un inmenso túnel que cerrará por el norte la M-50. Pasarán por él incluso camiones. Para usarlo habrá que pagar. Pese a la oposición del Ministerio de Fomento al trazado de la Comunidad, Esperanza Aguirre se ha salido con la suya. Las obras arrancarán a finales de 2008. La fecha de conclusión prevista, 2010.
La Consejería de Transportes explicó ayer que los subterráneos serán “ecológicos, no tendrán chimeneas, un sistema de filtros transformará los gases en residuos sólidos que se tratarán en vertederos, e irán a una profundidad de más de 30 metros”. No mencionan las 22 salidas de emergencia (una cada 500 metros) que recomienda la normativa europea sobre seguridad en los túneles y que desembocarían en monte del Pardo. Francisco Segura, responsable de Transportes de Ecologistas en Acción, criticó el proyecto: “Será un daño enorme y si permiten el paso de camiones los túneles serán aún mayores”. Dice que es “falso” que no vayan a haber consecuencias medioambientales: “Es una mentira interesada porque el monte tendrá que horadarse”.
Segura señala que en el proyecto previsto para acceder al túnel la autovía en superficie deberá atravesar el parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, que es también un área protegida. Mantiene también que la construcción de grandes carreteras tiene un efecto llamada para el coche privado y se traduce en una mayor contaminación.
El proceso ya está en marcha. Transportes sacará este mes el anteproyecto y hará la declaración de impacto ambiental. En enero o febrero se publicará la concensión y en verano, el proyecto definitivo. La consejería calcula que la M-50 cerrada la usarán 40.000 viajeros al día. Estará listo para el final de la legislatura. Huele a inauguración prelectoral.