Atentados en Argelia, Irak, Turquía y Pakistán
Argelia: 44 muertos en un atentado suicida
Al menos 44 personas murieron y 38 resultaron heridas en un ataque suicida perpetrado contra la Escuela Superior de Gendarmería de los Issers en la provincia de Boumerdes, a 55 kilómetros de Argel, según el balance provisional oficial del Ministerio del Interior argelino.
Varios testigos informaron de que un kamikaze dirigió su vehículo cargado de explosivos hacia la entrada principal de la escuela donde aguardaba, a primera hora de la mañana, un grupo de candidatos a ser admitidos en la Academia de Gendarmería. Otras fuentes afirmaron que un segundo terrorista se unió al grupo de aspirantes, donde hizo estallar el cinturón de explosivos que portaba encima.
Entre las víctimas figuran varios gendarmes y un grupo de pasajeros que viajaba en un autobús que cubría el trayecto entre Tizi-Ouzou y Orán y que también fue afectado por el impacto de la explosión. "Cuando salí del autobús me topé con los cadáveres. Fue horrible. Una verdadera carnicería", relató en una entrevista a la publicación electrónica Tout sur l'Algérie una de las víctimas que se encontraba dentro del vehículo.
Ningún grupo ha reivindicado aún la autoría del atentado, uno de los más cruentos que ha vivido Argelia desde que en diciembre del año pasado murieran 41 personas en un ataque perpetrado contra las oficinas de la ONU y un edificio oficial. El ataque fue reivindicado por Al Qaeda del Magreb Islámico.
Bourmedes, zona conflictiva
La provincia de Boumerdes, colindante con la de Argel, es uno de los principales escenarios en Argelia de atentados terroristas ya que sus densos bosques permiten eludir con facilidad la persecución de las fuerzas de seguridad.
El pasado diez de agosto un terrorista suicida hizo estallar una furgoneta cargada de explosivos en un puesto de la Gendarmería en una playa al noroeste de la región. En el ataque murieron ocho personas y 19 resultaron heridas.
Irak: la violencia desciende pero no desaparece
Tres policías iraquíes murieron y otras seis personas resultaron heridas la pasada madrugada en el centro de Ramadi, al oeste de Irak, al estallar un coche bomba en el momento en que los agentes trataban de desactivarlo.
Ramadi, en la provincia de Anbar, era uno de los bastiones de Al Qaeda en Irak en el pasado, pero la creación de los consejos de salvación en 2006, milicias a sueldo de EEUU compuestas por voluntarios suníes que luchan contra la red terrorista, supuso un descenso importante de la violencia en esa zona.
La sensación de que Irak es un país más seguro parece haberse trasladado a la opinión pública internacional con declaraciones como la del secretario general de Naciones Unidas el pasado primero de agosto. Ban Ki-moon, en una intervención en la ONU, hacía referencia al aumento de la seguridad gracias a las actividades políticas y militares de los últimos tres meses.
Aunque el país no parece ser ni mucho menos un camino de rosas. Este martes también, murió un militar estadounidense y otro policía en diversos enfrentamientos en Bagdad. Desde el inicio de la guerra han muerto en Irak 4.144 militares.
Mientras, Naciones Unidas conmemoró en Ginebra el quinto aniversario del peor ataque que ha recibido la organización. Fue en Bagdad en 2003, cuando 22 de sus empleados fallecieron en un atentado contra la sede. Entre ellos estaba el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, el diplomático brasileño Sergio Vieira de Mello.
El país más peligroso
Apesar de esos supuestos avances en la estabilidad del país, la revista 'The Economist' publicó el pasado mes de mayo un informe en el que señalaba a Irak como el país más peligroso del mundo por delante de Somalia, Sudán y Afganistán. La ONG iraquí Observatorio de los Derechos y las Libertades Constitucionales publicó a principios de este mes un informe en el que cifraba en 325 los muertos durante julio en Irak
Turquía: estalla contra un coche policial
Un presunto terrorista murió el martes y nueve personas resultaron heridas, entre ellos ocho policías, al explotar un coche al sur de Turquía cuando era perseguido por los agentes de seguridad en la autopista que une las ciudades de Mersin y Adana. El único ocupante del vehículo llevaba un cinturón con explosivos y la detonación se produjo al impactar el coche contra un control policial, según informó el gobernador de la región de Mersin, Husein Aksoy.
No aportó, sin embargo, ninguna información sobre la identidad del presunto terrorista aunque reveló que la Policía inició la persecución para detenerlo, ya que disponía de datos sobre sus planes para cometer un atentado. Los medios turcos señalaron que el fallecido pertenecía al grupo armado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) pero ninguna autoridad oficial lo confirmó.Ocho de los heridos son agentes policiales y se encuentran en estado grave, uno de ellos en condiciones críticas. El noveno es un civil.
Varios atentados
El 27 de julio de este año murieron 17 personas y 153 resultaron heridas en varias explosiones en un barrio comercial de Estambul. La autoría del atentado no fue reivindicada por ningún grupo, aunque las autoridades turcas señalaron al PKK como el responsable de la masacre. El grupo separatista desmintió estar detrás del atentado. El pasado siete de agosto, varios terroristas lanzaron cuatro granadas sobre un edificio municipal de Estambul hiriendo a tres personas. El objetivo del ataque era un cuartel militar situado a pocos metros del lugar.
Cuatro días después, nueve militares murieron y otros dos resultaron heridos al explotar una mina al paso del vehículo en el que viajaban en la provincia oriental de Erzincan. La autoría de estos ataques tampoco fue reclamada por el PKK, aunque fue acusado de haberlos perpetrado.
Pakistán: asesinados en un hospital
Un ataque suicida contra un hospital de la ciudad paquistaní de Tank causó este martes 24 muertos. Otras 20 personas resultaron heridas. El atentado se produjo en la demarcación de Dera Ismail Khan, una provincia del noroeste del país donde la influencia talibán en los grupos tribales es grande.
Las primeras investigaciones apuntan a que el autor de la masacre pudo ser un adolescente que entró en sala de emergencias del centro sanitario aprovechando la celebración de una protesta por la muerte de un líder local.
El ataque ya ha sido reivindicado por el movimiento Tehrik-e-Taliban Pakistán (TTP). En un comunicado, su portavoz aseguró que los ataques continuarán hasta que el Gobierno de Islamabad ponga fin a la operación militar en el distrito tribal de Bajaur.
En esta región, fronteriza con Afganistán, ya han muerto más de 500 personas, la mayoría insurgentes.