El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, se mostró el martes optimista sobre una solución al caso de los españoles retenidos en Chad, durante una reunión con familiares, representantes de la aerolínea para la que trabajan y del sindicato de pilotos Sepla.

"El ministro mostró su comprensión y apoyo a los familiares, consciente de la delicadeza de la situación y de las dificultades que la lejanía y la espera añadían al caso. No obstante, se mostró optimista y animó a las familias en la espera de que las diversas gestiones que se están llevando a cabo produzcan sus frutos", dijo un comunicado de Exteriores.

Chad acusa a seis integrantes de la ONG francesa Arca de Zoé de secuestro y fraude por intentar llevarse del país el 26 de octubre a 103 los niños sin la autorización debida, mientras que tres tripulantes españoles y un piloto belga están acusados de complicidad.

El máximo responsable de la diplomacia española, recordó a los familiares de los tripulantes que España siempre ha defendido su inocencia y les garantizó toda la atención consular necesaria. Los familiares de los tripulantes dijeron confiar en las gestiones del ministerio.

"Vamos a intentar ejercer la presión justa y necesaria porque ellos nos piden un poco de paciencia para hacer su trabajo. Tenemos confianza tanto en el ministerio como en las autoridades chadianas", dijo Francisco Javier López, portavoz de los familiares.

Inoportuna visita de Sarkozy

Mientras, Chad rechazó el martes como "inoportuna" la promesa del presidente francés, Nicolas Sarkozy, de que volvería al país africano para llevar de vuelta a casa un grupo de europeos acusados de intentar secuestrar a 103 niños.

El ministro de Justicia de Chad dijo que el sistema judicial del país se mantendría independiente de las presiones políticas, mientras que el ministro del Interior insistió en que los europeos que aún están detenidos deberían ser juzgados en Chad y cumplir sus sentencias allí.

"Iré y sacaré a los que todavía están allí, hayan hecho lo que hayan hecho", declaró Sarkozy el martes en una visita al noreste de Francia. "El papel del presidente es cuidar de todos los franceses".

El ministro de Justicia de Chad, Albert Pahimi Padacket, criticó la promesa pública de Sarkozy y la calificó de "inoportuna".

"El comunicado (de Sarkozy) no tendrá relevancia en el tratamiento del caso ante el juez", dijo.

Si son condenados, los miembros del Arca de Zoé podrían cumplir trabajosos forzosos entre cinco y 20 años.