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28.000 fallecidos testados. 40.000 posibles. Son las cifras del dolor. Luego está la política. Pablo Casado ha vuelto a acusar al Gobierno de no querer reconocer "a todos" los fallecidos. "Nos faltan más de 40.000 compatriotas aunque usted no reconozca a todos", ha  asegurado durante la Sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados. Pedro Sánchez, a su vez, ha acusado al PP de "utilizar a los muertos de la Covid en contra del Gobierno de España". Cualquiera que sea la cifra de la que los políticos hablen se ha convertido en el pimpampum de un debate que pretende ser de mano tendida. La portavoz del PP en el Congreso, en tono duro, ha espetado a la vicepresidenta primera que el Ejecutivo ocultan el dato real "por una conveniencia  política inhumana". Carmen Calvo le ha respondido que todos los datos, incluidos los 40.000 fallecidos, "están en organismos oficiales" y ha añadido que ese "no es su problema. Su problema es deteriorar constantemente". Hasta el homenaje a las víctimas del 16 de julio, ha quedado salpicado por la bronca entre ambas. Álvarez de Toledo lo ha llamado "homenaje al enfermo desconocido" y ha asegurado que, según ella "es en realidad, un homenaje a sí mismos". Calvo ha apelado a respetar a todos los fallecidos "sea la cifra final la que sea" y ha insistido en la línea del presidente del Gobierno: "usted ha decidido hacer política con los muertos", ha asegurado con firmeza. En paralelo, en la Comisión de Reconstrucción se intentan negociar acuerdos. -Redacción-