Hyundai cree en el hidrógeno
El NEXO estrena la segunda generación de célula de combustible con una autonomía cercana a los 600 km y se venderá en 2018.
Y la apuesta de Hyundai por la pila de combustible va en serio, porque este modelo es la segunda generación de una tecnología que se inició con el Hyundai Tucson FCEV, y sus responsables anuncian la venta del NEXO a lo largo del primer trimestre del año en algunos mercados entre los que no se incluye España por la falta de infraestructuras para el suministro de hidrógeno en las estaciones de servicio.
Con la apariencia de un SUV moderno, el NEXO mide 4,67 metros de longitud y 1,86 metros de anchura, algo mayor que el Hyundai Tucson y bajo el capó aloja un motor eléctrico de 161 CV de potencia, alimentado por una pila de combustible de 95 kW. La autonomía con el depósito de hidrógeno lleno se acerca a los 600 kilómetros (596 exactamente, 168 más que el Tucson) y también se han mejorado las cifras de aceleración y potencia para obtener un mejor rendimiento general. Ha superado todas las pruebas realizadas en condiciones extremas, incluido el repostaje, y ya está listo para demostrar que es un serio candidato como vehículo cero emisiones.
Entre las novedades tecnológicas que incorpora están el Monitor de Ángulo Muerto, que muestra al conductor la vista trasera y lateral mientras cambia de carril en cualquier dirección, de manera que no es necesario girar la cabeza para comprobar que no hay ningún obstáculo en esa zona al realizar una maniobra de adelantamiento. Utiliza cámaras de gran angular en los laterales y zona trasera del coche para recoger en imágenes lo que los retrovisores no pueden ver, visualizando en la pantalla situada en la consola central.
También viene equipado con un sistema de mantenimiento de carril que corrige la dirección para que el vehículo vaya siempre por su trayectoria entre 0 y 145 km/h y un asistente de conducción (HDA) que utiliza sensores y datos de la cartografía para una conducción más segura y confortable. Y con el sistema de Aparcamiento Autónomo Remoto (RSPA) se podrá estacionar el vehículo de forma automática, con o sin conductor mediante un mando desde fuera del vehículo, muy útil para las maniobras en batería cuando el espacio es insuficiente para abrir la puerta.
Y la apuesta de Hyundai por la pila de combustible va en serio, porque este modelo es la segunda generación de una tecnología que se inició con el Hyundai Tucson FCEV, y sus responsables anuncian la venta del NEXO a lo largo del primer trimestre del año en algunos mercados entre los que no se incluye España por la falta de infraestructuras para el suministro de hidrógeno en las estaciones de servicio.
Con la apariencia de un SUV moderno, el NEXO mide 4,67 metros de longitud y 1,86 metros de anchura, algo mayor que el Hyundai Tucson y bajo el capó aloja un motor eléctrico de 161 CV de potencia, alimentado por una pila de combustible de 95 kW. La autonomía con el depósito de hidrógeno lleno se acerca a los 600 kilómetros (596 exactamente, 168 más que el Tucson) y también se han mejorado las cifras de aceleración y potencia para obtener un mejor rendimiento general. Ha superado todas las pruebas realizadas en condiciones extremas, incluido el repostaje, y ya está listo para demostrar que es un serio candidato como vehículo cero emisiones.
Entre las novedades tecnológicas que incorpora están el Monitor de Ángulo Muerto, que muestra al conductor la vista trasera y lateral mientras cambia de carril en cualquier dirección, de manera que no es necesario girar la cabeza para comprobar que no hay ningún obstáculo en esa zona al realizar una maniobra de adelantamiento. Utiliza cámaras de gran angular en los laterales y zona trasera del coche para recoger en imágenes lo que los retrovisores no pueden ver, visualizando en la pantalla situada en la consola central.
También viene equipado con un sistema de mantenimiento de carril que corrige la dirección para que el vehículo vaya siempre por su trayectoria entre 0 y 145 km/h y un asistente de conducción (HDA) que utiliza sensores y datos de la cartografía para una conducción más segura y confortable. Y con el sistema de Aparcamiento Autónomo Remoto (RSPA) se podrá estacionar el vehículo de forma automática, con o sin conductor mediante un mando desde fuera del vehículo, muy útil para las maniobras en batería cuando el espacio es insuficiente para abrir la puerta.
Fuente: Vida Premium
© Diario Público.
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