Toyota RAV4 Hybrid
La nueva gama del RAV4 incluye, por primera vez, una versión híbrida. Llegará en abril con versiones de tracción delantera y total.
Ante el reto de un mercado C-SUV tremendamente competitivo, el nuevo Toyota RAV4 Hybrid combina la gran experiencia de la marca, acumulada a los largo de 20 años de evolución de los todocaminos compactos, con su reputada tecnología de sistemas de propulsión híbridos combinados Full Hybrid.
Para Toyota, unir sus dos fortalezas era un paso fundamental: fusionando la más evolucionada versión de su probado sistema híbrido, con la versatilidad propia del RAV4, y conseguir así prestaciones, eficiencia y polivalencia.
El sistema Full Hybrid de la marca japonesa consta de un motor de gasolina de ciclo Atkinson, con 152 CV de potencia, de 2,5 litros de cilindrada y una relación de compresión de 12,5 a 1. A él, se acopla uno eléctrico síncrono de imán permanente de 143 CV. Cuando ambos trabajan juntos se obtiene la notable potencia de 197 CV.
El sistema se completa con un generador, una batería de hidruro de níquel de 204 celdas, situada bajo los asientos traseros, y la correspondiente unidad de control y distribución de la energía. El sistema está asociado a una transmisión automática E-CVT, de variador continuo, engranada a las ruedas delanteras.
Las prestaciones obtenidas de esta manera son considerables, pues marca 180 km/h de velocidad máxima, una aceleración de 8,3 segundos en el 0 a 100 km/h, con un consumo medio de apenas 4,9 litros cada 100 kilómetros y unas emisiones de 115 gr/km de CO2.
También tracción 4x4
Para la versión de tracción total, un segundo motor eléctrico de 68 CV, montado en la parte posterior, se encarga de mover las ruedas traseras para lograr una mayor tracción en caso necesario y una capacidad de remolque de hasta 1.650 kilos. Este sistema de tracción total evita la complejidad que supondría un árbol de transmisión hasta el eje trasero. Como curiosidad, a pesar de agregar este segundo motor eléctrico, la potencia conjunta, de 197 CV, se mantiene inalterada, pues ambos sistemas comparten la unidad de control.
En el exterior, el Rav4 Hybrid cambia algunos detalles respecto a la versión convencional: así, la parrilla delantera es ahora más amplia y los grupos ópticos delanteros y traseros incorporan tecnología LED. También el portón trasero se ha rediseñado.
El interior del RAV4 Hybrid ha sido actualizado con materiales de mejor calidad, tanto en el salpicadero como en los paneles de las puertas, asientos y reposabrazos central. A lo largo de una breve toma de contacto con el coche, en la presentación del modelo a la prensa europea, pudimos corroborar que la calidad percibida, al sentarse en sus cómodos asientos, era muy grande.
El cuadro de mandos se ha renovado con una pequeña pantalla de 4,2 pulgadas digital, situada ante el conductor, y una gran pantalla táctil a color, de 7,0 pulgadas, que acoge el navegador y sistema multimedia. Lamentablemente, esta pantalla queda muy expuesta a los reflejos del sol, que impiden frecuentemente su visión.
Otro aspecto mejorable es la ubicación de los botones Eco, EV y Sport, de los que hablaremos más adelante, que quedan ocultos en la parte inferior del salpicadero.
Dinámicamente, es suave y muy agradable. La tecnología híbrida proporciona una conducción silenciosa y refinada, a lo que la añade la versatilidad propia del RAV4, con una posición de conducción elevada y un diseño potente y dinámico.
La entrega de potencia del sistema híbrido se ha modulado para ofrecer un tacto progresivo en la aceleración. Pronto comprobamos que el coche pide ser conducido con suavidad, a ritmos estables, aunque, por ejemplo, las incorporaciones a las autopistas se pueden realizar con rapidez, pisando a fondo, sin que se noten brusquedades y con un sonido de motor suficientemente reducido, pero todavía elevado respecto a otros modelos no híbridos.
El aumento de peso de 170 kilos, respecto al RAV4 estándar, se nota en forma de inercias las curvas y las rotondas, así como al adentrarse por caminos no asfaltados, donde la suave suspensión del RAV4 Hybrid se comporta especialmente bien mientras circulemos a un ritmo moderado.
Para una conducción más ágil, el cambio automático incorpora una función secuencial que, añadida a la opción de conducción ‘Sport’, seleccionable con uno de los botones del salpicadero mencionados antes, da una franca respuesta al acelerador y permite una conducción más deportiva con mejor maniobrabilidad en curvas.
Otros modos de conducción son ECO, pensado para reducir el consumo, y el EV, que utiliza únicamente el motor eléctrico, con cero emisiones.
El modelo incorpora las más recientes innovaciones en materia de seguridad y tecnología avanzada: El sistema ‘Toyota Safety Sense’ está diseñado para evitar o mitigar muchas de las colisiones, junto con el Detector de Ángulo Muerto, Alerta de Tráfico Cruzado Posterior y un monitor de Visión Panorámica, que muestra una vista de 360 grados sobre el vehículo cuando se desplaza a baja velocidad, muy útil para moverse por sitios estrechos.
El RAV4 Hybrid ofrece estilo, innovación, calidad y ecología. Tan convencidos están en la marca del éxito del modelo que, según sus cálculos, seis de cada diez RAV4 que se vendan serán de esta versión híbrida, por lo que se convertirá en el modelo estrella de la gama.
Aún no conocemos el precio, aunque estamos convencidos de que será una cifra competitiva, si tenemos en cuenta las ayudas oficiales a los modelos híbridos.
F. Ponce (Alicante) – www.vidapremium.com Fuente: Vida Premium
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